La llamada revolución post PC ya se ha consumado, los tiempos han cambiado y el papel cede terreno en su particular guerra contra lo digital. Las tabletas y los ebooks o libros electrónicos se están asentando como los dispositivos predilectos a la hora de consumir información y a la hora de leer novelas, ensayos o revistas.
A pesar de que los tablets son los reyes a la hora de ofrecer soluciones multimedia, es impactante el ver tantos libros electrónicos suplantando a las tabletas como dispositivos para leer. Pero es que estos pequeños aparatos esconden un poderoso secreto: la tinta electrónica, "¡Qué nítida se ve la letra con esta tecnología!", habrán exclamado unas cuantas veces los futuros compradores de un ebook. Sí, ahí reside el gran milagro del éxito de los libros electrónicos.
Fundamentos básicos
Hoy en día existen dos compañías que desarrollan este tinta electrónica; cada una de ellas lo hace de forma ligeramente diferente a la otra, aunque siguiendo unos principios básicos. Millones de microcápsulas, que hacen de portadoras de la tinta, y cargas negativas de un color muy blanco que pululan por estas microcápsulas. Aplicando diferentes polaridades a estos peculiares portadores de tinta podremos hacer que la pantalla se llene de patrones que el usuario puede reconocer fácilmente, como por ejemplo la letra de un libro.
Este sería el funcionamiento más simple, pero, evidentemente, hay algo mucho más complejo por detrás. Imagináos una gran bola rellena de tinta y, flotando por encima de ésta, muchas bolas de color blanco; de esta forma, si miramos la gran bola desde arriba, veremos solo el color blanco y si, por el contrario, lo hacemos desde abajo veremos la tinta en negro.
Si colocamos muchísimas de estas grandes bolas en una superficie (la de un ebook por ejemplo) y nos alejamos mucho, las pequeñas pelotitas blancas y la tinta se desdibujan creando esos patrones. La pregunta es clara, entonces: ¿cómo podremos hacer para que se desdibujen esas pelotas blancas y la tinta?
La respuesta es sencilla aunque no lo parezca: mediante un campo eléctrico. Dependiendo de la polaridad, las pelotitas blancas de dentro de la gran bola subirán hacia arriba o hacia abajo. Y es que poder juntar el blanco con el negro y crear esas palabras tan nítidas y, por otra parte, no nocivas para nuestros ojos es algo muy estudiado. Lo grandioso de esta tecnología es que se puede logra una paleta de grises enorme, residiendo ahí la verdadera clave de la tinta electrónica.
Hoy en día existen dos compañías que desarrollan este tinta electrónica; cada una de ellas lo hace de forma ligeramente diferente a la otra, aunque siguiendo unos principios básicos. Millones de microcápsulas, que hacen de portadoras de la tinta, y cargas negativas de un color muy blanco que pululan por estas microcápsulas. Aplicando diferentes polaridades a estos peculiares portadores de tinta podremos hacer que la pantalla se llene de patrones que el usuario puede reconocer fácilmente, como por ejemplo la letra de un libro.
Este sería el funcionamiento más simple, pero, evidentemente, hay algo mucho más complejo por detrás. Imagináos una gran bola rellena de tinta y, flotando por encima de ésta, muchas bolas de color blanco; de esta forma, si miramos la gran bola desde arriba, veremos solo el color blanco y si, por el contrario, lo hacemos desde abajo veremos la tinta en negro.
Si colocamos muchísimas de estas grandes bolas en una superficie (la de un ebook por ejemplo) y nos alejamos mucho, las pequeñas pelotitas blancas y la tinta se desdibujan creando esos patrones. La pregunta es clara, entonces: ¿cómo podremos hacer para que se desdibujen esas pelotas blancas y la tinta?
La respuesta es sencilla aunque no lo parezca: mediante un campo eléctrico. Dependiendo de la polaridad, las pelotitas blancas de dentro de la gran bola subirán hacia arriba o hacia abajo. Y es que poder juntar el blanco con el negro y crear esas palabras tan nítidas y, por otra parte, no nocivas para nuestros ojos es algo muy estudiado. Lo grandioso de esta tecnología es que se puede logra una paleta de grises enorme, residiendo ahí la verdadera clave de la tinta electrónica.
Amazon, los reyes del mercado
Existen mucho lectores electrónicos; todos ellos han evolucionado de forma que casi todos incluyen, como poco, el navegador, una opción que demanda el mercado. Pero Amazon, los reyes del mercado del libro electrónico, ha querido adentrarse en el mundo de las tabletas con su niña mimada, el Kindle Fire. Un ebook que no lo es y una tableta con alma de libro lector electrónico.
Grosso modo, este Fire es una tableta de 7 pulgadas con pantalla capacitiva, en cuyo interior corre una versión de Android cocinada para adaptarse a las especiales necesidades de Amazon. De esta forma, la interfaz de usuario está optimizada de forma diferente a lo que estamos acostumbrados a ver en un ebook .
Realmente, este Fire no ha supuesto un gran escollo para las ventas de otros libros electrónicos ni para el sempiterno iPad, pero sí es una grata alternativa para aquellas personas que no buscan una tableta ni un ebook. Además, el precio tan competitivo le coloca en cabeza de este tipo de dispositivos “low cost”.
En cuanto al hardware, el Fire está a la altura, por ejemplo el procesador es de 1Ghz y la conectividad corre a cargo de la antena WiFi y USB, la memoria es de 8 Gigas Flash, la autonomía viene de la mano de una batería de 4400 mAh (que en cristiano viene a ser unas 8 horas de duración). Pero lo mejor de todo son los accesos directos al Amazon Store con todo lo que ello significa: gran cantidad de artículos que se encuentran en la tienda on line, así como libros electrónicos (lo que se traduce en unas cuantiosas ventas para no ser un iPad).
http://www.vadejuegos.com/noticias/como-funciona-un-ebook-el-futuro-es-el-libro-electronico-20120416.html
Existen mucho lectores electrónicos; todos ellos han evolucionado de forma que casi todos incluyen, como poco, el navegador, una opción que demanda el mercado. Pero Amazon, los reyes del mercado del libro electrónico, ha querido adentrarse en el mundo de las tabletas con su niña mimada, el Kindle Fire. Un ebook que no lo es y una tableta con alma de libro lector electrónico.
Grosso modo, este Fire es una tableta de 7 pulgadas con pantalla capacitiva, en cuyo interior corre una versión de Android cocinada para adaptarse a las especiales necesidades de Amazon. De esta forma, la interfaz de usuario está optimizada de forma diferente a lo que estamos acostumbrados a ver en un ebook .
Realmente, este Fire no ha supuesto un gran escollo para las ventas de otros libros electrónicos ni para el sempiterno iPad, pero sí es una grata alternativa para aquellas personas que no buscan una tableta ni un ebook. Además, el precio tan competitivo le coloca en cabeza de este tipo de dispositivos “low cost”.
En cuanto al hardware, el Fire está a la altura, por ejemplo el procesador es de 1Ghz y la conectividad corre a cargo de la antena WiFi y USB, la memoria es de 8 Gigas Flash, la autonomía viene de la mano de una batería de 4400 mAh (que en cristiano viene a ser unas 8 horas de duración). Pero lo mejor de todo son los accesos directos al Amazon Store con todo lo que ello significa: gran cantidad de artículos que se encuentran en la tienda on line, así como libros electrónicos (lo que se traduce en unas cuantiosas ventas para no ser un iPad).
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